Los de Chechu Villaldea estrenaron su casillero de puntos en un buen partido

El Bidasoa Irún llegaba a Oviedo con la vitola de gran equipo y lo demostró en el polideportivo de Vallobín. En la cancha del Naranco, esta tarde se pudo ver un gran partido, con incertidumbre en el marcador de principio a fin y los equipos lanzados en busca de la victoria. El resultado final, 26-26, ya se vio reflejado en el descanso, al que se llegó con empate a 12 goles.
El partido resultó emocionante de principio a fin. El rival tiene jugadores de mucha calidad en su intento por volver a la liga ASOBAL y ante el Naranco mostró muy buen juego. Durante todo el partido estuvo el marcador muy próximo, aunque en el tramo final del mismo, los visitantes se fueron de tres goles a falta de tres minutos para el final. El equipo carbayón logró entonces una gran remontada para dejar el marcador final en equilibrio y conseguir un punto importante, más que nada por el buen juego desplegado y la sensación causada al público que se congregó en el Polideportivo de Vallobín.